La naturaleza del escorpión
Estos son los asuntos tratados:
1.- Declaración de Valladolid: el compromiso de las ciudades por la Economía Circular.
El EG del PP acaba de descubrir la gestión sostenible (Objetivos de Desarrollo Sostenible), de las Declaraciones de Sevilla y de Valladolid. Como no la practicaba, cabe la esperanza de que, como el recién converso, se lance a ponerla en marcha. Todos los grupos le recordaron que no basta con firmar la adhesión, sino que tiene que cumplir con los compromisos que adquiere. Porque «la fe sin obras, es fe muerta»; o, en términos laicos, «Obras son amores…». Porque ni han incluido medidas en el borrador del Presupuesto, ni han solicitado nada de los fondos Next Generation todavía. Se aprobó con el voto de Vox en contra, que merece comentario aparte.
2.- Propuesta del grupo mixto (MásMadrid) de 9 de febrero para el cambio de la administración, organización y funcionamiento de la Mancomunidad de gestión de residuos del Sur.
Más Madrid Villaviciosa no consiguió que saliera adelante, a pesar de que nuestro Ayuntamiento forma parte de dicha Mancomunidad. Los residuos siempre huelen mal, así que algunos prefieren no acercarse al tema.
3.- Propuesta del grupo Mixto (IU) de 14 de febrero de 2022 para la reforma y acondicionamiento de parques infantiles y parques caninos.
La concejala María Vela, efectuados algunos matices, sí se vio favorecida en la votación, incluso por el EG (que, como casi siempre, «ya estaba en ello»). El modelo de gestión del Ayuntamiento de Boadilla en este punto pareció servir como desiderátum de los parques infantiles.
4.- Propuesta del grupo PSOE de 15 de febrero para instar al Gobierno de la Comunidad de Madrid para la mejora del sistema sanitario en cuanto a personal e instalaciones, y la adhesión al pacto por la Salud.
A pesar de la contundencia de los datos de presupuestos destinados a sanidad por el Gobierno de la Comunidad de Madrid, que muestran su abandono, para el PP de Villaviciosa, el gobierno de Madrid es el mejor. Se aprobó la propuesta y el Pacto de sanidad local con la abstención de Vox.
5.- Propuesta del grupo VOX para la modificación de los estatutos de la Entidad urbanística VILLAPARK.
Se vive una situación de alegalidad, ya que no existe Convenio con el Ayuntamiento, como es necesario. Y, además del Convenio, se propugna una necesaria modificación de sus estatutos. Tangencialmente, se plantea si las Entidades urbanísticas tienen sentido. La Comisión de Entidades Urbanísticas que es la competente para debatir este tema hace dos años que no se reúne. Claro que, la concejala Milagros Martínez, Ciudadanos, mantiene que el concejal del EG responsable de la materia, ni sabía que existe esta Comisión. Ahora dice que la convocará inmediatamente.
6.- Adhesión al Manifiesto de la Femp del Día de la Mujer.
Todos a favor. Vox, ¡cómo no!, en contra.
7.- Contrato de parques y jardines. Se ha sobrepasado el plazo para efectuar el contrato. Una empresa se ha apartado y otras no cumplen requisitos, por lo que las anulaciones (al parecer, sin razones demasiado entendibles) probablemente serán objeto de reclamación judicial, con el lógico retraso. Se propone la adjudicación a una empresa solo porque presenta la oferta más ventajosa económicamente. Solo lo vota a favor el PP, mientras todos los demás se abstienen. Lucero es atacado por Ernesto Serigós que critica duramente al concejal Lucero y le pronostica que no podrán hacer bien el trabajo y denuncia que ni siquiera se establecen los criterios de cómo hacer el control por parte del Ayuntamiento.
Ruegos y preguntas
¿Cuándo se van a llevar a cabo las obras necesarias para garantizar la seguridad del Pabellón de judo, pendientes desde hace tantos años?
¿Cuándo se va a convocar el Consejo de Medio Ambiente?
¿Se van a llevar a cabo inspecciones sanitarias a los comercios y especialmente a los restaurantes?
¿Qué se va a hacer ya con el matadero?
¿Se va a tramitar alguna solicitud de los Fondos Europeos Next Generation?
María Ruiz se echa al monte
Hace algo más de un año, María Ruiz cometió su primer gran error con el pueblo de Villaviciosa, entregando el gobierno municipal al PP conociendo como conocía el perfil de quienes lo integraban. Estos le «pagaron» no dejándoles entrar en el gobierno. Aunque ellos ahora saben que si se hubieran incorporado, habría sido peor aún convivir con los concejales del PP; haría ya mucho tiempo que estarían cortándose las venas. Ellos solo obtuvieron dos rentabilidades: quitarse la pesada carga de haber apoyado antes a un gobierno de Ciudadanos y Psoe (hurtándoselo al PP); y situarse en la oposición, que, con un gobierno tan incapaz como el que han dejado, es todo un caramelo; ¡un chollo, vamos!
Así que el equipo liderado por Ernesto Serigós, con sus tres concejales, se aprestó a llevar a cabo un seguimiento de la gestión del EG, implacable, rigurosa y eficaz, proponiendo medidas y acciones beneficiosas para nuestra localidad y mostrando su superioridad en los asuntos municipales. Demostrando su capacidad y obviando, casi siempre, cuestiones ideológicas de extrema derecha. Su lideresa, con tareas muy por encima del nivel municipal, bastante tiene con su trabajo como Diputada del Congreso y nada menos que su puesto entre los 12 miembros del Comité Ejecutivo Nacional de Vox. A pesar de eso, hace solo unos días, en el Debate sobre el Estado del Municipio leyó un discurso realista, serio y, por momentos, brillante; siempre pegado al suelo, al territorio de Villaviciosa y circunscrito a la gestión, lamentable, de este Ayuntamiento.
¿Qué ha ocurrido para que, tan solo dos semanas después, en este Pleno, María Ruiz, en un desparrame de la más pura carcundia, abandone planteamientos de gestión municipal, proclame principios de la más pura extrema derecha y arremeta contra valores democráticos, ambientales y de sostenibilidad, deslegitimando instituciones? Parecía tener un desmedido interés en que todos, aquí y en Madrid, la vieran cómo no desmerecía en su radicalidad, con las recetas de las que hace gala su partido, y sin venir a cuento, porque la propuesta que se trataba en ese momento (Economía Circular) era una nimiedad que no daba pie a semejante intervención (que, en todo caso, sí era previsible en la Declaración por el Día de la Mujer). Solo es comprensible desde su voluntad de no perder peso en su partido, pero, sobre todo, por la situación de grave crisis que atraviesa estos días el PP nacional, considerada desde Vox como una excelente oportunidad de marcar territorio y mostrar de manera diáfana sus principios para captar los votos de los desencantados del PP.
Se escucharon lindezas como que el Gobierno de la Nación nos dice cómo tenemos que pensar, comer y amar (¿?); que nos va a hacer dejar de comer carne (¡!) que para que unos vivan mejor habrá que acabar con la vida de los que estorban, de los discapacitados, recomendando su aborto (¡!); que acabarán con los mayores y los enfermos, fomentando la eutanasia (¡!); que la lucha por el medio ambiente va a acabar con la industria, la ganadería, y la agricultura, …
Y en relación con el tema de la mujer (8 de marzo) intenta desacreditar a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), que es la que ha elaborado la Declaración para el Día De la Mujer, porque «está politizada». Claro, no es politizada, sino política, ya que está compuesta por representantes elegidos en las correspondientes elecciones. ¿Y lo dice una persona que es concejala, diputada y miembro del Comité Ejecutivo Nacional de un partido político? ¿Ella no está» politizada»? «El feminismo persigue cambiar la supremacía del hombre por la de la mujer, nos parece malvado ponernos de un lado de la sociedad, de la mujer, no podemos apoyar esta declaración porque en ella se victimiza a las mujeres, no podemos admitir la paridad de género en los puestos de liderazgo». Todo un ideario.
En definitiva, nada que no supiéramos del pensamiento de Vox, pero del que hasta ahora nos venían librando. La concejala Ruiz acaba de echar por tierra el cuantioso trabajo que sus concejales de Villaviciosa vienen realizando, con rigor, con seriedad y en defensa de la calidad de vida de nuestros vecinos, sin perder el tiempo en batallas ideológicas. Ha hecho saltar por los aires el respeto mutuo que todos nos hemos dado.
¿A partir de ahora qué? ¿Se dedicará en los Plenos a atacar a los homosexuales como su amigo Putin? ¿O a promover la represión de los inmigrantes?… ¿O a qué más?
¡Qué pena! Como en la historia de la rana y el escorpión nos lo temíamos: no ha podido aguantarse más. ¡Está en su naturaleza!