En un discreto rincón del callejón Carlos Valero Gil hay un lugar sorprendente al que se accede, como en la Alicia de Lewis Carroll, por una puerta desapercibida que introduce al público a un espacio sorprendente donde la tramoya, la altura y las generosas dimensiones dan la sensación de estar en un espacio gótico, un lugar entre el cielo y la tierra.
Beatriz y Maisa, sus responsables, dan continuidad en este nuevo espacio, al proyecto que ya llevaba en marcha en la Plaza de las Margaritas desde hace varios años y que, trasladado a este mágico espacio, amplia su actividad como escuela de pintura al teatro, abriendo su casa al Estudio Susana Verdú, conocida actriz y directora teatral de Villaviciosa de Odón.
El pasado viernes 13 comenzó su actividad con una interesante exposición de los alumnos que han trabajado con Beatriz y los demás profesores a lo largo de este curso.
Además de disfrutar de la obra de los alumnos y de un hospitalario cóctel, se descubrió el retrato del presidente ucraniano Zelensky realizado por la interesante pintora ucraniana Daria Levin, víctima de la guerra y refugiada en casa de una familia de Villaviciosa de Odón. En el próximo número de ACUA se publica un amplio reportaje sobre la epopeya que han vivido Daria y su madre. El retrato ha sido un encargo de ACUA para ilustrar nuestra próxima portada.
Teatro en secreto
Acorde con la ubicación del espacio, el grupo de teatro de Susana Verdú Producciones Escénicas está representando todos los sábados a las 20:00 dentro del ciclo “Teatro en Secreto” dos obras de su repertorio: “La cestilla” de Plauto y “Mariana Pineda” de Lorca.
«La Cestilla» de Plauto
Plauto estaría encantado con esta puesta en escena cuyo único, loable y ambicioso objetivo es entretener al público. Un magnífico grupo de actores y actrices, morcillas contemporáneas, mezcla de estilos y saltos en el tiempo, máscaras de la Comedia del Arte, bromas picantes al más puro estilo Lina Morgan o un ardiente cuplé, la gesticulación del elenco que enfatiza el carácter de los personajes y los enredos de la trama consiguen que el público no pierda detalle y disfrute de cada minuto de la representación. ¡Teatro puro teatro!
Mariana Pineda
El mismo escenario, los mismos actores, las mismas herramientas teatrales, pero un universo completamente distinto a la obra anterior. Donde antes reinaba el histrión y el enredo, ahora el maravilloso texto de Lorca se adueñaba de la escena.
Carolina Masián dio vida a una Mariana Pineda con una interpretación sobria y emotiva. Su voz llegaba clara y precisa hasta un público embelesado con la poesía de Lorca.
El amor apasionado de Mariana, la fidelidad inquebrantable de Fernando, el fuerte amor a un ideal de Pedro y la lasciva y corrupta pasión del juez por Mariana convierten esta pieza teatral en el muestrario perfecto de las pasiones humanas magníficamente interpretadas por Víctor García Adán en el papel de juez y de José Esteban Pavo como Pedro.
El elenco intergeneracional del numeroso grupo de magníficos actores y actrices proporcionaron tal vida, realidad, acción, movimiento y emoción que provocaron un largo y emotivo aplauso del público.
Aunque el clímax de la emoción se alcanzó cuando, la directora Susana Verdú dirigió unas palabras a un público que todavía seguía haciendo pucheritos por la ejecución de Mariana.
Susana, emocionada por el trabajo de sus actores, aplaudió la interpretación de su grupo que lo había bordado y emplazó a los asistentes a seguir disfrutando de la magia del teatro.
Me encanta el cambio, a mejor, que ha tenido este pequeño callejón, antes llamado irónicamente «Gran Vía».
Me encanta que se haya respetado, protegido, restaurado y ensalzado una de las puertas de cuarterones más bonitas de Villa. Suerte que no pudo disfrutar la bellísima puerta, con su tejadito, de la calle Santa Ana, aquella que fue portada de revistas. Aquella puerta que daba paso a su izquierda a una biblioteca de libros botánicos y en su frente, un jardincito con un magnífico árbol cuya especie no tenemos ya en Villa, ni en el Forestal. Volvamos al «Espacio Creativo»… han colocado más puertas y ventanas llenas de historias pasadas y una enorme pieza de madera, tumbada, que me tiene intrigada.
Me encantó la inauguración, ver caras amigas en un ambiente artístico, añoro mi época de la universidad. Teníamos otros quehaceres el día de la inauguración, pero ellos no impidieron que, durante unos minutos, fuéramos partícipes de la inauguración del ¡¡¡Espacio Creativo!!!