¿No sabes qué serie empezar? ¿Quieres saber qué película se estrenará la próxima semana en streaming? En ACUA creamos un espacio donde podrás enterarte qué ver o cómo verlo, por qué verlo, a quién ver o dónde y cuándo verlo. Esto es The French Dispatch.
Te invitamos a descubrir: El ferrocarril subterráneo.
QUÉ CONVIERTE EL FERROCARRIL SUBTERRÁNEO EN LA MEJOR MINISERIE DE 2021 —GLOBO DE ORO—
Este es el descenso a los infiernos literal y —al mismo tiempo— metafórico de Cora, a quien vemos en el primer frame sacudiendo sus brazos con pavor mientras cae por un foso soberbiamente iluminado por un halo de luz cenital, cuasi-bíblico. Entonces una madre entierra su propia placenta; el foco de un tren tamiza un sinfín de partículas de polvo en suspensión; un esclavo corre a campo través, pero hacia atrás, como intentando impedir un siniestro; otro, alza los brazos en alto, como rindiéndose; en la mirada de un anciano blanco se resume toda tristeza posible; una niña huérfana de pelo afro procura huir de un incendio sin saber bien dónde; la sombra de lo que otrora era un hombre se pierde en la bruma; el llanto de una niña rompe el silencio, sonorizando el dolor. Y entonces Cora —ahora de pie, a la orilla de un río— se gira parsimoniosamente a observar cómo se acerca la cámara a sus irritados e inmensos ojos, mientras su voz en off nos susurra que lo primero, pero también lo último que le ofreció su madre fueron disculpas. Y en ese preciso instante en el que lo único que puedes hacer es ponerte en pie a aplaudir entiendes lo que es el arte.
El ferrocarril subterráneo es capaz de concentrar en esos 2 min. exactos de obertura toda su esencia; destilando en cada plano una calidad-claridad visual sencillamente exquisitas. Y eso que es apenas la carta de presentación de un film dividido en diez capítulos —de aproximadamente una hora cada uno— que relata con una crudeza descarnada —crepuscular— la odisea de una serie de esclavos afroamericanos que —como Cora— buscaban huir de la opresión que padecían en los campos de cultivo del sur por rutas alternativas hacia el norte de Estados Unidos a mediados del XIX. Es cierto que nunca hubo propiamente un ferrocarril, pero sí existió una vía o red clandestina coordinada que permitió a hombres de bien prestar asistencia a quienes sencillamente pretendían ser libres. Se cree que esta colaboración permitió salvar la vida de miles de esclavos, pero también contribuir notablemente a la opinión pública en favor de los partidarios de la causa abolicionista.
PORQUÉ EL FERROCARRIL SUBTERRÁNEO ES TAN RECOMENDABLE
Esta miniserie es una adaptación de la aclamada novela homónima premiada el mismo año de su publicación (2017) con el Premio Pulitzer. Colson Whitehead —su autor— adaptó además el guion con el beneplácito del director Barry Jenkins —premiado con el Oscar por Moonlight—. En esta oportunidad, su esfuerzo se ha visto recompensado con el Globo de Oro.
Es este un viaje a las profundidades orquestado por un auténtico acervo de orfebres que son capaces de urdir un retrato esencialmente humano, y necesariamente humanista. Es evocador, infinitamente emocional, pero también devastador —por el bien del spoiler no citaré escenas concretas que es necesario apreciar, a pesar de su crudeza—. Y lo recomiendo porque el director es además lo suficientemente considerado como para exhibir la crueldad, sin recrearse en la miseria de las víctimas —solo lo estrictamente necesario—.
QUIÉN DESTACA EN EL FERROCARRIL SUBTERRÁNEO
He citado al creador-director, así como al autor de la obra que le precede, pero son solo piezas de un puzle que se completa con un reparto soberbio que abandera Cora —Thuso Mbedu—, quien prácticamente se basta por sí misma para sostener todo el peso del relato, o Caesar —Aaron Pierre—; desconocidos aún del mainstream, quienes sin duda darán que hablar. También salen William Jackson Harper —el filosófico Chidi de The Good Place— o el siempre impecable Joel Edgerton —recomiendo infinitamente verle también en una preciosa cinta de Jeff Nichols que tiene mucho que ver con todo esto—.
Jenkins es tan buen director de actores que incluso intérpretes esporádicos brillan con luz propia, como es el caso del reputadísimo Peter Mulan, que además crea un nexo de unión a las múltiples historias que se ramifican conforme avanza el relato.
EN DÓNDE Y DESDE CUÁNDO PUEDO VER EL FERROCARRIL SUBTERRÁNEO
Está disponible desde hace prácticamente un año en Amazon Prime Video. Si no la has visto aún date el tiempo para saborear la aportación visual de James Laxton que hace de cada plano un cuadro, o el virtuosismo de un Nicholas Britell que es capaz de recrear un sonido atmosférico hipnótico. Solo como apunte extra destacar que la banda sonora cuela al cerrar cada uno de los capítulos una pieza contemporánea con cierta anacronía —a lo Tarantino en sus últimos experimentos, pero con criterio: aquí se buscó que esas canciones conformasen a la vez un alegato antirracista—.
THE FRENCH DISPATCH DICE
Esta es una miniserie de dimensiones épicas, con un peso narrativo sólido que se sostiene sobre un conflicto clásico: el de cualquier relación paterno-filial —Cora culpa a su madre de su abandono y su acechador, acaba por abandonar a su padre—. Es como si el propio Jenkins tuviera también sus propias cuentas pendientes con uno de los auténticos padres del cine estadounidense clásico, D. W. Griffith —El nacimiento de una nación es una obra no exenta de polémicas por su claro matiz racista—. Y es que esta es una historia de pasado que huele a rabioso presente, con heridas sin cicatrizar, hecha de anhelos sin cumplir.
The French Dispatch es la nueva sección de ACUA en la que te recomendaremos películas y series en streaming. Leonardo Alonso coordina esta columna que se inspira en ese film-carta de amor al mundo del periodismo que firmó-filmó Wes Anderson. Y con la misma pasión se ha propuesto resumirte, empleando la clásica técnica informativa de 5W, qué ver, por qué verlo, a quién ver o dónde y cuándo verlo. Coucou!
Gracias por esta recomendación. Parece de un gran interés la serie y, por supuesto, no dejaremos de verla para poder emitir una opinión. Gracias también por la sección; un regalo para los enamorados al séptimo arte.
Muchas gracias por dejarnos tu comentario, Miguel Ángel!